Después de ganarme mi 3DS gracias a este unboxing no tenía mejor manera de estrenarla que con The Legend of Zelda: A Link Between Worlds, el primer juego que llegó a la portátil de Nintendo (si omitimos el remake de Ocarina of Time) dispuesto a convertirse en un imprescindible de esta consola.
Había pasado mucho tiempo desde que jugué por primera vez a The Legend of Zelda: Majora’s Mask en mi Nintendo 64 y mucho más aún desde que terminé The Legend of Zelda: Ocarina of Time, juego que sigue siendo el mejor para mí de toda la saga, así que Igone me prestó A Link Between Worlds y la magia de la saga volvió a encandilarme, así que vayamos por partes y veamos de qué pasta está hecho el juego.
¡Link, que llegas tarde!
Como no puede ser de otra manera comenzamos el título manejando a Link que en esta ocasión trabajará en una fragua antes de llegar a convertirse en el héroe de Hyrule nuevamente, o ¿tal vez deberíamos decir de Lorule? Y es que uno de los puntos más curiosos de este juego es que nos permitirá viajar a un mundo paralelo al Hyrule que conocemos donde los enemigos son más fieros y donde deberemos proteger a Hilda, la princesa alternativa a Zelda. Con estas pistas ya os estaréis imaginando que esta vez no habrá que salvar sólo a Zelda, sino que también habrá que salvar a Hilda pero para ello lo primero que tendremos que hacer es darnos a conocer.
Por eso, tras comenzar el juego y llegar a nuestro lugar de trabajo, observaremos como el capitán de la guardia se deja su espada y como personitas amables que somos se la llevaremos al Castillo y es precisamente ahí cuando nos harán la 13/14 y nos meterán en el fregao de salvar al mundo de las tinieblas. Allí un misterioso enemigo raptará a la hija del sacerdote (Zeres) y será entonces cuando nos encomienden la tarea de buscar los tres colgantes de valor en primer lugar y posteriormente de ir salvando a los sabios para seguir avanzando en la aventura. Unas mecánicas ya vistas en anteriores juegos pero que nunca nos cansaremos de repetir.
¿En qué te puedo ayudar?
En esta travesía por los mundos podremos ir consiguiendo diferentes objetos, aunque ahora tendremos una novedad y es que no los conseguiremos en las mazmorras sino que Rovio nos los prestará según los necesitemos o nos los venderá.
La diferencia está en que si los alquilamos, además de costarnos menos rupias, si morimos los habremos perdido y nos tocará ir a por ellos a la tienda otra vez. A no ser… Que hagáis como yo que en cuanto podía iba a salvar la partida por si las moscas. Por eso y porque el tal Rovio era un timador de mucho cuidado que encima de que le dejas tu casa para su tienda no es capaz de darte ni un detallito ¡habrase visto!
Aparte de todo esto los objetos no se gastarán, en su lugar tendremos una barra de fuerza o vigor, como queráis llamarle, que disminuirá a medida usemos el objeto y que pasado un tiempo se volverá a recuperar.
Libertad absoluta
En esta ocasión el juego nos permitirá una libertad absoluta y tras la introducción seremos libres de ir a donde queramos para completar las mazmorras a nuestro antojo. Pero vamos, no hay mayor problema en elegir unas u otras, yo las fui haciendo al tuntún o más bien, según las encontraba porque alguna para dar con ella tela y no tuve mayores problemas.
Además, aunque en esta ocasión no tengamos a mano a mi querida Epona no tendremos problema para movernos por el mundo porque tendremos una campana mágica con la que llamaremos a una escoba mágica que nos llevará a las diferentes zonas del mapa. Estas zonas se activarán cada vez que encontremos una nueva veleta (puntos de guardado).
Una manera distinta de jugar
A pesar de que jugaremos como siempre hemos venido haciendo en la saga, este juego aporta una novedad bastante curiosa, ¡convertirnos en pintura!
Formar parte de la pared será de gran ayuda cuando queramos escapar de algunos enemigos, conseguir objetos que están en zonas inalcanzables y la más importante de todas, poder cambiar de dimensión e ir al mundo de Lorule. Además, también será vital para eliminar a ciertos jefes que en esta ocasión tendrán un modo más agresivo una vez les quitemos cierta cantidad de vida.
Los puzzles no podían faltar, aunque no serán muy difíciles en la mayoría de ocasiones. Por lo que las mazmorras, salvo que te atasques, las puedes terminar entre 30 minutos y 1 hora. Eso sí, serán únicas, de varios pisos y muy divertidas, lo que aporta un toque más de originalidad al título. Cada una de ellas está pensada para sacar el máximo partido a un objeto determinado y será haciendo uso de él y tu ingenio la forma en la que conseguirás tener éxito.
Un punto a tener en cuenta en las mazmorras es que si morimos perderemos todos los objetos que tengamos alquilados, además de que tendremos que empezarla de nuevo. Por eso y como comenté arriba, guardar a cada poco es indispensable para no repetir lo mismo una y otra vez. Quizá éste es el ingrediente que le da el toque de dificultad extra a la facilidad de los puzzles, la paciencia por no ir a matacaballo y tener cuidado de no perecer en el intento.
La duración no lo es todo
En lo que respecta a la duración no es que sea excesivamente largo, a mí me duró unas 8-10 horas, aunque siempre se le pueden echar más si queremos sacar el 100% de sus secretos o terminarlo en la dificultad del héroe. Para alargar la experiencia también contará con coleccionables y minijuegos.
Dentro del primer grupo podríamos incluir las piezas de corazón o los maimai, una especie de moluscos bebé que ha perdido su descuidada madre, aunque claro yo si tuviera 100 hijos alguno también se me desperdigaría xD. Mientras que en lo que respecta a los minijuegos habrá de varios tipos como recoger el mayor número de rupias en un tiempo determinado, evitar los cucos o una especie de juego de béisbol entre otros.
Apartado técnico
Respecto a este punto deciros que el diseño 3D de los personajes y del escenario está perfectamente conseguido, con una vistosidad y un colorido propios de la saga que encajarán apropiadamente con el efecto 3D de la consola, bastante conseguido en mi opinión. No le pondría ningún pero porque a mí sinceramente siempre me ha interesado más divertirme a que me entre por los ojos, aunque este juego tiene ese apartado cubierto para la plataforma que se trata. En cuanto a la banda sonora podréis reconocer temas clásicos de The Legend of Zelda y otros nuevos como los que nos encontraremos al llegar a Lorule.
Conclusión The Legend of Zelda: A Link between worlds
Para ir terminando este tocho que me ha salido de The Legend of Zelda: A Link Between Worlds os diré que es un título divertido, entrañable y que os devolverá la magia de otras entregas. Además, si habéis jugado A Link to the Past comprobaréis como A Link Between Worlds bebe del mismo mapa, un punto más a su favor de nostalgia a su favor. Aprovecha perfectamente el efecto 3D de la consola y es un título que por las novedades jugables, el diseño y la apuesta original que nos ofrece debe ser jugado sí o sí.
8 comentarios
La verdad es que es jugazo porque…
Estela es a ocarina Of time
Como
Planetgradius es a link to the past
Te podrás imaginas que con semejante premisa lo disfrute como un enano ^^
A mí también me gustó mucho éste, a ver qué tal ahora el Breath of the Wild 🙂
No hace mucho lo adquirí, la verdad que yo me hice (fan) con el zelda de snes y este me toca mi nostalgia ante todo, tengo también los dos remake de zelda, pero me pudo este, es un zelda dulce, lo estoy disfrutando
Tiene muchos parecidos, normal que te recuerde al de snes 🙂
Está muy chulo
la gran interrogante que me quedo de Zelda de snes son las palabras de del tío de link (héroe fracasado) "Zelda is your…", cuando me hice con la versión de GBA borraron el dialogo… que pensó Miyamoto en esa época?
Pues a esa pregunta es mejor que te conteste Igone que es uno de sus juegos favoritos xD
Gracias Estela3d, excelente análisis del titulo
Gracias!!! :3