Esta noche en The Game Awards, Amazon Game Studios y Crystal Dynamics han salido al escenario con la artillería pesada: dos bombazos nuevos de Tomb Raider. No uno. Dos. ¿Qué más se puede pedir? Si teníamos ganas de volver a meternos en la piel de la arqueóloga más famosa de todos los tiempos, ahora lo vamos a poder hacer por partida doble.
Por un lado, Tomb Raider: Catalyst, la siguiente gran aventura de Lara Croft. Por otro, Tomb Raider: Legacy of Atlantis, una reinvención total del juego clásico de 1996 que marcó a toda una generación. Vamos, que los fans han cenado nostalgia y futuro a la vez.
Tomb Raider: Catalyst – Lara se mete en un lío (otra vez)
Crystal Dynamics lleva trabajando en este título desde que se anunció su colaboración con Amazon en 2022, y se nota. Catalyst lleva a Lara al norte de la India, donde un cataclismo mítico que ha desatado antiguos secretos y fuerzas que no te gustaría ver en la vida real.
Cazatesoros de medio mundo también se presentan allí, porque claro, no podían quedarse en casa, y Lara tendrá que descubrir la verdad, elegir de quién demonios puede fiarse y evitar que alguien use ese poder ancestral para liarla parda. Todo muy cotidiano para ella.
Hecho en Unreal Engine 5, este será el mundo más grande de Tomb Raider hasta ahora: tumbas perdidas, rompecabezas de los que dan gusto, misterios antiguos y gadgets personalizables que harán que tu yo interior de Indiana Jones aplauda. Llega en 2027 para PS5, Xbox Series X|S y Steam.
Tomb Raider: Legacy of Atlantis – el clásico vuelve en versión “wow”
El anuncio sorpresa de la noche: una modernización del debut de Lara Croft de 1996. El mítico. El que te hizo saltar en polígonos. Ahora vuelve con gráficos de infarto gracias a Unreal Engine 5 y un diseño actualizado que respeta el espíritu original, pero sin el look de PS1 con resaca.
Lara explorará ruinas perdidas, resolverá mecanismos asesinos, saltará por sitios que desafían la lógica humana y se enfrentará a criaturas nada simpáticas mientras busca las piezas del Scion, un artefacto con poder para… bueno, ya sabes, acabar con el mundo.
Llega en 2026 para PS5, Xbox Series X|S y Steam.
La misma voz para dos Laras
Ambos juegos contarán con Alix Wilton Regan como Lara Croft, conocida por Dragon Age: Inquisition, Cyberpunk 2077 y Mass Effect 3. Su interpretación promete dar a Lara un toque más profundo, más fresco y más “no me toques las ruinas antiguas que las vi primero”.
Amazon y Crystal Dynamics ponen toda la carne en el asador
Christoph Hartmann (Amazon Game Studios) afirma que están encantados de colaborar con Crystal Dynamics para ofrecer estas dos aventuras tan distintas y que su objetivo es crear historias que enganchen tanto a los fans veteranos como a quienes llegan nuevos.
Por su parte, Scot Amos (Crystal Dynamics) asegura que la colaboración con Amazon ha sido clave para dar vida a estos proyectos con total libertad creativa. Y desde Flying Wild Hog, Michał Szustak destaca que rehacer la aventura original de Lara ha sido un honor… y una responsabilidad de las que dan vértigo.
Lara a través de los años
La saga Tomb Raider no es solo una franquicia: es una leyenda del videojuego. Con más de 20 títulos, unos 100 millones de copias vendidas desde 1996 y una comunidad que supera los 160 millones de fans (según una encuesta de 2022), está claro que Lara Croft no conoce la palabra “descanso”.
Su popularidad se disparó aún más con las películas basadas en el juego original y el reboot de 2013, que devolvió a Lara al centro del universo gamer. No es casualidad que TIME la incluyera entre los 15 personajes de videojuegos más influyentes de todos los tiempos: lleva más de dos décadas siendo un icono global.
La última Trilogía Survivor (Tomb Raider (2013), Rise of the Tomb Raider (2015) y Shadow of the Tomb Raider (2018)) sumó más de 200 premios y nominaciones, contando la historia del renacimiento de Lara con un enfoque más humano, intenso y espectacular.
En resumen: Tomb Raider no solo forma parte de la historia del videojuego… sigue siendo una de las marcas estrella del entretenimiento de aventuras. Y lo mejor es que Lara todavía tiene cuerda para rato.
