Análisis de Monster Boy and the Cursed Kingdom en Nintendo Switch

Después del maravilloso remake de Wonder Boy: The Dragon´s Trap nos llega esta secuela de la mítica saga de SEGA gracias a la compañía francesa The Game Atelier. En su día, y aprovechando el lanzamiento de dicho remake, nos encargamos de analizar toda la saga, así que si te quieres poner al día puedes leer nuestro análisis.

Lo primero de todo es puntualizar que pese a que ya sabemos que en todas partes se refieren a este Monster Boy como una secuela espiritual de la saga, tras jugarlo podemos asegurar que se trata de una entrega más, debido a la cantidad de referencias que tiene a todos los títulos de la misma, incluyendo nombres de héroes de otras entregas, objetos, enemigos y millones de referencias musicales.

No en vano el juego cuenta con el apoyo de Ryuichi Sishizawa, creador original de la saga, y como compositores también alguno de la saga como Yuzo Koshiro y Michiru Yamane, además de otros como Motoi Sakuraba, Keiki Kobayashi y Takeshi Yanagawa, si no los conoceís deberíais, ya que han colaborado en grandes títulos como Castlevania, Streets Of Rage, Dragon Quest o Star Ocean.

La historia no es que sea digna de las novelas de Virginia Wolf, de hecho es bastante simple, nuestro peliazulado personaje, de nombre Jin, se encuentra tranquilamente en su cabaña cuando aparece su tío montado en un tonel volador totalmente piripi portando una varita mágica. Una vez que abandona el lugar, vemos a nuestro hermanito convertido en un dragoncillo, diciendo que le ha convertido nuestro tío.

Yendo por el primer nivel en plan tutorial para familiarizarnos con los controles, y tras enfrentarnos al primer Boss, nuestro tío nos echará una maldición convirtiéndonos en un hombre cerdo, con nulas habilidades de combate, pero con la posibilidad de invocar algún conjuro de fuego y oler cosas que no se aprecien a simple vista.

Una vez alcancemos el pueblo veremos que todos los habitantes de Monster World han sido convertidos en animales con aspecto humanoide por parte de nuestro tío, por lo que, sintiéndonos responsables de sus actos, decidiremos ir en busca, tras el consejo de un cura-gato de nombre un tanto sospechoso, de unas esferas legendarias que podrían ser la solución y la cura para la maldición que asola el reino.

Y así empieza la aventura.

El apartado visual del juego es simplemente espectacular, son gráficos 2D pero todo dibujado a mano, gozando de buena animación en todo momento,  y los fondos disfrutan de varias capas de movimientos realizados con mucho detalle.

Para los que no hayan jugado a ninguna de las entregas anteriores, decir que se trata de una aventura de espada, brujería y fantasía, en la cual prima la exploración, el plataformeo, visitar zonas ya conocidas una vez tengamos un nuevo power up para encontrar tesoros o simplemente seguir avanzando la historia; vamos, lo que a día de hoy se le conoce como Metroidvania. También decir que puedes jugar sin ningún problema sin haber jugado a ninguno de los anteriores, solo que perderás las millones de referencias a otros Wonder Boys (incluido el primero).

Posteriormente iremos consiguiendo diversas esferas que nos permitirán cambiar de aspecto y habilidades a voluntad (al contrario que en Dragon´s Trap, que necesitaremos de una plataforma de transformación), de esta forma podremos ser una culebra, un hombre sapo, un hombre león, un hombre dragón y así hasta poder recuperar nuestro aspecto natural.

Cada forma tiene sus propias habilidades, y hay diversos puzzles en el juego que para poder solucionarlos tendremos que hacer uso de estas transformaciones. Por poner un ejemplo, el sapo puede nadar a grandes velocidades bajo el agua, así como hacer uso de su lengua de muy diversas formas (entre ellas el hacer rotar una habitación 90/180 grados si dicha habitación tiene el engranaje necesario para ello), el hombre dragón puede volar o escupir fuego, el hombre león correr a grandes velocidades de forma que puede correr encima del agua sin hundirse o la culebra colarse por espacios estrechos.

Los controles que tenemos dependerán un poco del persona en que estemos convertidos, no obstante y a groso modo se tratarían de: aalto, ataque, acción especial de forma, cambio de forma y cambio de ataque mágico.

Aparte el juego tiene pequeños detallitos que nos harán sonreír, por ejemplo, si con el hombre sapo usamos el ataque con lengua en un insecto, se lo comerá y nos dará vida, como si se tratara de un sapo en la vida real. El hombre cerdo es el único que podrá comer unas trufas/power up, que nos amplificarán los poderes mágicos o nos harán aprender nuevas magias…

La verdad es que pese a que el juego es desde el inicio muy bueno, se nota un gran pico de mejora a partir de obtener el orbe del sapo, ya que es en ese momento cuando nos encontraremos con muchos puzzles que requieran realizar varios cambios de aspecto para resolverlos. Además, podremos empezar a equiparnos armaduras y escudos (en las formas de cerdo y culebra no se puede) y habrá cierto componente estratégico con éstas, ya que unas armaduras serán más efectivas en un entorno que en otro (no hagáis como servidor que al llegar al volcán se le olvidó comprar las armaduras que protegen contra el fuego de forma que moría al recibir dos golpes, ¡¡¡y yo flipando con el pico de dificultad!!!).

En general, el juego va mejorando exponencialmente y la curva de aprendizaje del mismo no para de aumentar, por lo que siempre estás descubriendo nuevas dinámicas y no llegas a aburrirte de las mecánicas en ningún momento.

El juego tiene una duración fácil de 15 horas, si queremos completarlo al 100%, depende de nuestras habilidades, mínimo unas 18 horas. Sabemos que el juego es bastante carete (40 pavazos y solo en su versión digital, al menos en Europa, si sabéis buscar bien podréis encontrarlo en formato físico por 36 euros en webs americanas), pero realmente vale mucho la pena. Es una pequeña obra maestra que, si además sois fans de la saga, disfrutaréis como los títulos de antaño.

Además mencionar que el juego esta perfectamente traducido y localizado al castellano (no como los Shantae).

Pese a no tratarse de spoilers tipo que te cuenten que va a pasar en la historia, sí son cosas que igual te arrancan una sonrisa al verlas si las reconoces, soy consciente de que hay gente a quien no le gusta que le cuenten este detalle, de modo que aviso que podrían considerarse de SPOILERS por algunos.

– Melodías: el mundo interior de Monster Boy se encuentra saturado de viejas melodías de todas las entregas anteriores, totalmente remezcladas y otras puntuales. Por poner un ejemplo, la única canción que tiene el primer Wonder Boy suena cuando entramos en el ascensor camino a la ciudad de las nubes y ésta suena como eso, una canción de ascensor ¡¡¡¡delirante!!!!

– Las vitrinas de la catedral incluyen imágenes de todos los héroes de anteriores entregas, como Asha (Monster World IV), Shion (Wonder boy V: Monster Wolrd III) o los anónimos héroes de Wonder Boy I y Monster Land.

– A su vez hay un momento del juego en que tendremos que hacernos con varias reliquias, que son objetos de anteriores entregas, como la cruz de la salamandra (Wonder Boy III: Dragon´s Trap), la ocarina (Wonder boy V: Monster Wolrd III) o el hacha de piedra (Wonder Boy I).

– El primer animal en que nos transformamos (cerdo) es el mítico vendedor de las tiendas de otras entregas (parche en ojo incluído).

– Hay una misión secundaria para conseguir un contenedor de corazón que nos llevará a la meka mazmorra, con gráficos 8bits donde rememoraremos los primeros minutos de Wonder Boy III: Dragon´s Trap hasta acabar con el malvado Meka-Dragon, además, para acceder a este evento entraremos dentro de una… ¡MASTER SYSTEM!

– Algunos monstruos son homenajes de otros, uno muy puntual es el Pez del Wonder Boy Monster´s Lair, que es un animal que lanza sus escamas que a su vez se convierten en pececillos.

 – En un momento de la aventura nos reencarnaremos en Shion, protagonista de Wonder Boy V: Monster World III, reviviendo la secuencia en la que nos enseñarán a tocar las melodías de la mítica ocarina.

Monster Boy and the Cursed Kingdom es muy buen juego y uno de los mejores metroidvanias que he podido jugar. Es un juego hecho de fans para fans y la verdad es que se nota. Una dificultad más que ajustada, en ocasiones un poco difícil, pero afortunadamente posee de checkpoints que facilitan al usuario medio.

Si os gusta la franquicia o si sois fans de las anteriores entregas es de compra obligatoria.Si te gusta el juego y estás pensando en comprarlo, te dejamos un enlace a Amazon donde poder hacerlo.